Luego de leer el primer artículo de Gonzalo Soto Catalán, publicado en la red social digital facebook, mi mente se puso en dos lugares puntuales de la realidad y de la nivelación del ser humano.
Claro está que nosotros poseemos, por la educación que obtuvimos, un sinnúmero de capacidades y falencias. Como una información en el “Set Up” de la gnosis y de ella se vuelcan los conos de los cimientos de la sabiduría. Haciéndose muy perentorio esclarecer el título de este escrito; él cual se va derechito a un blog que ha dormido esperando recibir esta letras.
La Curia romana es, de por sí, la organización de gobierno más antigua que se conoce en nuestra era. Quienes están al interior de ella deben ostentar el grado máximo de sobre nivel en esta humanidad. Digo esto ya que: desde antes del Concilio de Nizea 8siglo 3º después de Cristo, la curia ya mentaba como hacerla para mantenerse en el tiempo y perdurar entre los hombres.
Desde esos tiempos han pasado unos cuantos siglos y la humanidad mantiene esa posición para con la Curia y su estado Romano dentro de Italia. Sin embargo, aquel poder está lejos ya que su nivel no le permite estar acá en Chile y poder enterarse de los dichos del señor Coltauco.
Un hombre que me vio y me dijo cuantas cosas estaban en su razón y en su nivel de entendimiento de las escrituras bíblicas. No escatimó tiempo para saludarme y entregarme la fuerza que mi espíritu necesitó, nivelando mi lejanía con la cuna de mi Fe.
Ahora es cuando entro en el nivel que ha develado Gonzalo. Uno oscilante que puede verse trastocado por la lejanía de la idea y la cercanía de las palabras. Todo condicionado por la capacidad de poder trasladarse entre uno y otro estadio y saber que: el nivel particular es el que debió uno recibir. De esa forma se puede absorber lo mejor de todos los niveles dados y encontrados; o que salen a nuestro encuentro.
Atte.
HSQO
